El secreto de la paz de Dios.

Introducción:

La lucha constante del hombre siempre ha sido la búsqueda de paz. En nombre de la paz se han creado asociaciones como la ONU que pretenden conciliar a los países del mundo para que pueda existir paz entre ellos, los sindicatos dentro de las empresas que buscan evitar conflictos laborales, discriminación o malos pagos, en búsqueda de que las funciones laborales se puedan realizar en paz, las leyes que buscan normalizar la conducta de la sociedad para que se pueda coexistir en paz.

El ser humano tiene la necesidad de sentir paz en su interior, y cuando hablamos de este tema nos es inevitable como creyentes pensar en Jesucristo quien demostró tener paz, incluso en los momentos de mayor aflicción y dolor dentro de su vida como hombre. Pero ahora cabe la pregunta:

¿Cómo puedo yo tener paz en todo tiempo a pesar de las dificultades y problemas, como obtener esa paz que sobre pasa todo entendimiento de la que nos habla la palabra?

Desarrollo:

Pues para ello podemos descubrir varias características importantes en Filipenses 4:4-7.

“Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca. Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús. ”

Dentro de este pasaje podemos encontrar varias características mediante las cuales si las podremos obtener paz dentro de nuestros corazones.

1) Regocíjate en el Señor.

Cuando escuchamos esto normalmente pensamos en que tenemos que tener una “Sonrisa Colgate” siempre en la cara, pero la realidad es que este pasaje nos habla de otra cosa aun más profunda que esto.

Aunque la palabra regocijo en este pasaje si proviene de la palabra griega “χαίρω jaíro” que significa estar alegre, feliz calmadamente o bien, a lo que se refiere es a regocijarse en el Señor, es decir que tu alegría solamente sea aquel que te compro a precio de sangre.

Cuando nuestra alegría depende de que las cosas nos salgan a la perfección, las personas nos traten bien, nos encontremos en una buena situación económica, no tengamos presiones, la relación con nuestra familia y/o pareja este bien, etc. Y no depende directamente de la persona de Jesucristo tenemos un problema, ya que esto es un indicativo de que tu regocijo no está en Dios y esto te pudiera llevar incluso a tener otros dioses, que en algunos casos podría ser el dinero, la familia, el trabajo, etc. Pero cuando nuestro regocijo esta en el Señor aun si no tuviésemos nada, estaríamos alegres porque tenemos aquello que es la fuente de nuestra alegara y solo entonces es cuando podremos decir:

“Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales; Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza, El cual hace mis pies como de ciervas, Y en mis alturas me hace andar.” Hab 3:17-19


2) Se amable con todos.

Cuando nuestra gentileza o nuestra amabilidad sale a relucir, esto nos producirá paz y llevara a cambiar nuestro entorno en el cual nos desenvolvemos.

La angustia, tristeza, decepción o preocupación sin duda alguna se refleja en tu apariencia física, ya que “el corazón alegre hermosea el rostro, más por el dolor del corazón el espíritu se abate. Pr 15:13” y si esto se refleja en tu apariencia física será transmitido a las personas que están a tu alrededor.

¿te has dado cuenta que cuando pasas demasiado tiempo con una persona empiezas a hablar, actuar e incluso pensar como esa persona? Esto es precisamente porque lo que existe dentro de ti puede ser transmitido a otras personas. Si tu estas en una sala de urgencias en un hospital es difícil que te sientas del todo bien, ya que el ambiente produce un cambio dentro de ti.

Si tu provocas que tu entorno se convierta en gris jamás lograras tener paz dentro de tu vida, mas si tu amabilidad es conocida por todos, sin duda alguna provocaras paz en tu entorno y en tu vida misma, reflejando que El Señor esta cerca de los afligidos de corazón.


3) No estés ansioso.

La vida de una persona ansiosa se refleja en su salud, ya que la ansiedad o afán conlleva preocupación, la preocupación estrés, y el estrés cansancio o agotamiento físico.

Pero la mejor manera de vencer esto es depositando nuestras cargas sobre Dios, si tu realmente depositas tu preocupación, ansiedad, o aquellas cosas que te afanan en las manos de Dios descansaras, ya que el está dispuesto a dar descanso para tu vida tal como lo menciona Mateo 11:28:

“Venid a mi todos los que estéis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.”

Si tú tienes un problema fiscal, tienes que pagar impuestos o algo por el estilo, tu depositas eso en manos de un contador y en el momento que lo haces realmente descansas porque sabes que el contador se encargara de hacer los cálculos y documentos necesarios para que puedas realizar tus labores fiscales.

Pero es increíble como decimos que confiamos en Dios y que depositamos nuestras cargas en él, y aun así seguimos luchando preocupados por hacerlo nosotros mismos. Algunos dicen erróneamente: “La biblia dice ayúdate que yo te ayudare…” cosa que es una completa y total mentira, la Biblia no menciona eso en ninguna parte de la escritura y a causa de falta de conocimiento de la palabra se ha creído que para que Dios actué es necesario que tu lo hagas y dejamos de lado que él es Dios y puede hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que le pedimos.

Claro no trato de decir que si tú tienes un examen complicado le digas a Dios que te ayude y no estudies para tu examen, no claro que no… Lo que te trato de decir es confía en Dios y en tu vida tu haz lo que esté en tu mano para hacer, y lo que no esté en tu mano deposítalo en manos de Dios y descansa en él.

“En mi vida yo hare lo posible, ya que de lo imposible se encarga Dios…”

Conclusión:

Sin duda alguna Dios quiere darte de su paz, que sobre pasa todo entendimiento y el dejo si palabra como guía para que pudieras obtener esta paz que él ha ofrecido para los que le aman. Sigue el consejo de la palabra y sin duda alguna tendrás una vida de abundancia, paz y prosperidad porque ya no vivirás en tus consejos, sino en los de Dios.