domingo, 21 de marzo de 2010

Proyecto De la Autoridad al Servicio

El día de hoy iniciare con un nuevo proyecto que tengo en mente desde hace tiempo y en el que he trabajado un poco, pero del cual quisiera pedir su apoyo y colaboración para que este se desarrolle de manera adecuada, no con la mentalidad de un solo hombre con muchos errores (como lo soy yo), sino que sea desarrollado por una comunidad de creyentes preocupados por producir un cambio positivo dentro de la Iglesia Cristiana que nos lleve a tener un corazón como él de Dios.

En los siguientes meses estaré publicando en este espacio pequeños ensayos acerca del tema de la "autoridad" de manera regular (además de todo lo que publico normalmente), ustedes pueden ver, analizar y criticar estos ensayos buscando que las ideas sean complementadas y si hay algún error que pudiera cometer sea corregido.

De igual manera abrí un grupo en Facebook llamado "De la Autoridad al Servicio" en el cual se dará lugar a foros de discusión con temáticas de acuerdo al tema de la "autoridad" así como su uso y abuso para de esta manera también complementar este proyecto.

Al final de todo esto se realizara un libro escrito por un servidor pero con colaboración de cada uno de ustedes que llevara por titulo "De la Autoridad al Servicio" con el cual se pretende dar una alternativa al esquema de "autoridad" que actualmente tenemos dentro del liderazgo cristiano llevándonos a comprender más el esquema que Jesús nos ha dejado como ejemplo.

Aquí dejo el primer ensayo de muchos que se estarán publicando, de antemano gracias por su colaboración.

Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo; Mas en la multitud de consejeros hay seguridad. Proverbios 11:14


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Durante años he tratado de comprender el tan mencionado "esquema de autoridad" que se ha manejado en el liderazgo cristiano dentro de las iglesias, vez tras vez me he encontrado en medio de situaciones las cuales para mi mente parecieran ser inconcebibles al observar aparentes desviaciones de la "autoridad".

Es triste ver como muchos cristianos se han alejado de las iglesias o congregaciones a causa de cosas negativas que han visto y experimentado, hablando constantemente de un sistema de creencias corrupto del cual se ha hecho participe la misma.

Por momentos pareciera que las iglesias han perdido aquello que caracterizo a nuestro Señor Jesucristo mientras estuvo en esta tierra, el cual nunca tuvo problemas de "autoridad", ya que él mismo vino a plantar un esquema diferente al que hemos decidido seguir de manera representativa dentro de la burbuja en la que vivimos a la cual hemos decidido llamar "cristianismo".

Sin duda Dios está preparando una iglesia gloriosa, sin mancha ni arruga para que comparta con él la eternidad y tú formas parte de esta, pero es necesario que la obra de su espíritu santo continúe y nos perfeccione conformándonos a la imagen de Jesucristo.

1.1 Definiendo la Autoridad.

La palabra autoridad como la conocemos actualmente en nuestro vocablo español en Latinoamérica proviene del latín "autoritas" y "potestas". El primero se define como la autoridad que la persona posee, por ser consecuente con la verdad y los valores que predica, mientras que la segunda palabra se utiliza para referirse a la autoridad que es delegada como un poder o cargo, a la cual también llamamos potestad.

Al ver este origen me hace pensar primeramente en algo que ha sido evidente durante mucho tiempo pero que pocos logramos comprender por completo y esto es que existen personas que han adquirido autoridad a causa de que son consecuentes con la verdad y sus acciones, mientras existen personas que solamente tienen potestad derivado de que han sido puestos en algún cargo de poder.

El primer tipo de persona son aquellos que a causa de su ejemplo, manera de comportarse y actuar se convierten en una autoridad viva de lo que dicen.

Normalmente si a nosotros se acerca un amigo nuestro a decirnos que tenemos algún defecto que corregir, como por ejemplo un mal carácter, y nosotros conocemos que él tiene un carácter que en ocasiones es difícil, es muy probable que la autoridad que ejerza sobre nuestras vidas sea nula, mientras una persona que tiene un carácter que la mayoría del tiempo es adecuado y viene a tratar de corregirnos, su ejemplo impondrá cierto grado de autoridad sobre nuestras vidas lo que producirá un cambio en nosotros derivado de lo observado en esta persona.

Por otro lado tenemos aquellos que tienen potestad como un cargo, los cuales pueden tener o no la primera característica, pero que estos tienen cierto derecho a marcar lineamientos a causa del cargo que ejercen. Por ejemplo si tú tienes un trabajo y eres asalariado de alguien esa persona tiene cierta potestad dentro de tu vida ya que es tu jefe, capaz de indicarte que actividades deberás de realizar dentro de la empresa.

Recuerdo una ocasión en la que un amigo al cual aprecio le comento a una persona que: era su pastor, este al escuchar esas palabras le dijo que él no era pastor a lo que mi amigo contesto: “un pastor es aquel que cuida de las ovejas, usted ha cuidado de mi vida desde que estoy aquí, así que por lo tanto usted es mi pastor”. Cuando yo escuche esto quede impresionado y vino algo a mi mente que al día de hoy he podido comprender de una mejor manera.

Existen líderes con autoridad que no tienen un cargo, mientras existen líderes con cargo que carecen de autoridad.

La autoridad como tal debe ser vista desde el punto de vista de la "autoritas" que es aquella autoridad que ha sido ganada y esta debe ser diferenciada de la potestad que aunque las palabras son similares en su esencia tienen una connotación diferente.

jueves, 11 de marzo de 2010

Todo por servir


Durante casi 5años he tenido el enorme privilegio de trabajar con jóvenes y líderes de jóvenes en diferentes iglesias, de diferentes maneras, cada vez llevándome a una experiencia diferente dentro de esta pasión que tengo que es el ministerio juvenil, pero nunca había experimentado lo que ahora he tenido la oportunidad de vivir en estas ultimas tres semanas.

Cuando inicie a trabajar en el ministerio juvenil uno de mis pastores de aquel tiempo al cual siempre recuerdo con afecto y aprecio ya que él vio en mi algo que nadie había visto y me encamino a descubrir la pasión de trabajar con jóvenes, me dijo que este versículo debería ser mi lema dentro de mi vida ministerial:

Todo lo que te viniere a la mano para hacer hazlo según tus fuerzas. Ecl 9: 10


Cuando yo escuche este pasaje que él me compartía de una manera especial, se convirtió en mi deseo él poder estar dispuesto para todo lo que Dios pusiera a mi mano para hacer, siempre y cuando esto estuviera dentro de mis fuerzas.

A partir de este momento inicie una de las aventuras más extraordinarias que he podido experimentar.

Pese a que antes ya servia dentro de mi iglesia como ministro de alabanza, entre otras cosas, en este momento mi perspectiva de servicio cambio e inicie a tomar todas las cosas que venían a mi mano para hacer.

Gracias a ello predique dentro de mi iglesia por primera ocasión en un culto dominical cuando anteriormente no lo había hecho, gracias a ello trabaje arduamente en varios movimientos juveniles como VME3:16 que se encarga de formar y apoyar grupos de oración dentro de las escuelas, gracias a ello trabaje coordinando parte de "La Red" que era una alianza de líderes juveniles y grupos de jóvenes que nos reuníamos a edificarnos y compartir la visión que deberíamos tener dentro del ministerio juvenil, gracias a ello empece a predicar en algunos otros grupos de jóvenes y congresos, gracias a ello ahora tengo el enorme privilegio de colaborar con Especialidades Juveniles dentro del equipo de la Convención Internacional de Liderazgo Juvenil en la ciudad de Dallas, etc.

¡Uff jamas imagine a que me llevaría el tomar la decisión de hacer lo que tuviera a mi mano siempre!

Sin embargo en estas tres ultimas semanas se presento una oportunidad que yo no esperaba, no pretendía, ni estaba buscando que fue dar clases de Tecnologías (computación) dentro de el Instituto Bilingüe México Moderno (una escuela cristiana en la ciudad de Chihuahua) a 6 grupos de nivel secundaria (adolescentes entre 12-15años aproximadamente), de ser sincero cuando me invitaron a trabajar en ello para mi no era algo atractivo, pero yo tenia un lema de hacer todo lo que tuviera a la mano según mis fuerzas y tenia la capacidad de hacerlo, además de pensar que seria una buena oportunidad de impactar adolescentes, así que decidí iniciar con esto que ocupa 3 horas de mi día solamente, lo que me deja tiempo para poder continuar con mi trabajo ministerial

Para no alargar más este post, déjame te comento que llevo 3 semanas trabajando en este colegio y aunque mi idea no es dar clases o dedicarme a ello me ha dado una perspectiva muy diferente de lo que son los adolescentes.

Dentro de los grupos de jóvenes en México creo que es más común encontrar que la mayoría son adolescentes entre las edades antes mencionadas y siempre tuve una visión acerca de ellos, sus inquietudes que tienen a esa edad, sus luchas, entre otras cosas.

Pero ahora que he tenido la oportunidad de estar en ese lugar en el que pasan la mayor parte del día me he dado cuenta que realmente muchas de las luchas que yo pensé que tenían los adolescentes no son las que yo pensaba, sino que tienen otras luchas a las cuales se enfrentan día con día y dentro de nuestros grupos de jóvenes no notamos y no hemos podido darles las herramientas para que se conviertan en verdaderos triunfadores.

Tal vez mi idea principal no es dar clases dentro de un colegio, pero algo que he descubierto en este tiempo es que entre más tengas oportunidad de entrar al mundo de los adolescentes y los jóvenes más podrás entenderlos y llegar a ayudarlos en sus verdaderas necesidades, así que, ¿que tal si durante un tiempo dejas de experimentar tu faceta de líder y por un momento te atreves a entrar a su mundo de alguna manera para poder conocer realmente sus necesidades, no desde la iglesia, sino desde donde viven diariamente?

La locura de hacer todo lo que me venga a la mano me ha llevado a cosas que son verdaderamente extrañas, pero creo que cada una me ha servido para comprender de manera más clara como realmente Dios quiere que le sirvamos.